Cultivar, producir y exportar rosas ecuatorianas de alta calidad requiere de manos honestas y trabajadoras que cuiden de cada detalle para que nuestros clientes en todo el mundo disfruten rosas de inigualable belleza, rosas de colores únicos y de larga duración.
Sabemos que cuando nuestras rosas llegan a sus manos, representan la materialización de muchos sentimientos, por eso valoramos, respetamos y cuidamos a quienes lo hacen posible: nuestros colaboradores.
Garantizamos condiciones laborales dignas, seguras y saludables para que nuestros colaboradores, hombres y mujeres pertenecientes a comunidades locales, y sus familias mejoren sus condiciones de vida.